La fibrosis quística es un trastorno que puede causar daños graves en los pulmones y el sistema digestivo a causa de la mutación de un gen que regula el movimiento de la sal que entra y sale de las células. La Clínica Mayo explica que la fibrosis afecta la producción de secreciones ligeras y resbaladizas que funcionan como lubricantes, haciéndolas pegajosas y espesas, tapando conductos y pasajes.
Esta es una de las enfermedades que se pueden detectar en el cribado neonatal realizado a los usuarios del Subsistema de Salud de la Policía Nacional dentro del primer mes de vida antes de que desarrollen síntomas. Debido a que es un trastorno heredado puede presentarse entre los miembros de una misma familia.
Las personas con esta enfermedad usualmente padecen síntomas como tos persistente con moco espeso, sibilancia, intolerancia al ejercicio, infecciones pulmonares, congestión nasal y sinusitis. Además, los intestinos no son capaces de absorber completamente los nutrientes de los alimentos, generando poco aumento de peso, obstrucción intestinal y estreñimiento.
Actualmente la fibrosis quística no afecta la calidad de vida, aunque requiere cuidados médicos frecuentes. Sin embargo, se debe buscar atención médica inmediata si el paciente tose sangre, tiene dolor en el pecho o un fuerte dolor de estómago.
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